Los periodistas no somos historiadores, aunque en nuestro trabajo de informar registramos hechos que, con el tiempo, serán recordados como hitos en la historia del país o del mundo. Haciéndolo, en El Faro privilegiamos que nuestras publicaciones sean sobre hechos o fenómenos útiles y, en la medida de lo posible, de máxima relevancia para la vida y los intereses de la comunidad; y la buena narración que permita contar las cosas de manera más clara e interesante, que permita trascender la superficialidad aparente y desvele la complejidad de las cosas, y que perdure en la memoria del lector.

Como en años previos, El Faro recapitula en este cierre de 2012 lo que según su equipo de Redacción marcó el año que está terminando. La información se compendia en seis categorías y creamos dos espacios extras que nos permiten también contarles dos cosas adicionales: cuáles, según el escrutinio de la redacción de este periódico, fueron los hechos noticiosos del año –que no necesariamente están reflejados o referidos a un texto o a una fotogalería o a un vídeo en particular- y quién fue la persona que, por sus acciones u omisiones, positivas o negativas, causó el mayor impacto en la vida de El Salvador y sus habitantes.

La redacción de El Faro participó en la selección de este anuario durante una sesión ad hoc para proponer, debatir y votar por nuestros materiales. No esperamos –ni deseamos- que todos nuestros lectores coincidan con nuestro criterio.

Incluimos también una sección de “lo más visto”, una lista de nuestros materiales que más “visitas” recibieron; y eso no necesariamente coincide con nuestra selección oficial.

Esperamos que este resumen le sea útil para echar un vistazo al año que termina y prepararse mejor para afrontar 2013.