Nombre: Diego Murcia
Ocupación: escritor y periodista
Edad: 32 años
Recuerdo que lloré. Fue tan confuso. Estábamos mi padre, parado junto a mí, y mi madre, sentada, de espalda a nosotros. No sé si ella estaba hirviendo el maíz para la masa de las tortillas pero a esa hora solía darme un huacal y mandarme al molino. Ese día, nuestra vida cotidiana detuvo su marcha tan pronto empezaron las noticias. Algo pasaba en Chapultepec. Quién sabe dónde quedaba eso, pero hablaban chistoso. Los tres estábamos clavados, incrédulos, viendo la transmisión nacional. No sé por qué pero aquellos arreglos florales, puestos al centro de la mesa de los firmantes, parecían centenares de personas que observaban el evento desde abajo. Así es el mundo a los once, creo. Y, de pronto, la voz del locutor dijo algo como: “Se está firmando la paz”. Yo no le creí. Si hacía dos días una bala casi mató a mi hermana. Hacía una semana habíamos visto desde los palos de mango cómo los helicópteros disparaban tizones contra las torres de “La Motocrós”. Además, hacía un mes que toda mi familia, toda, dormía en el piso de la casa porque dizque se iban a tomar San Antonio Abad. De pronto, oí que mi madre empezó sollozar. Y mi padre me abrazó, al tiempo que murmuraba: “¡Se acabó!”, como si tratara de convencerse. También él empezó a llorar. El hombre de piedra lloraba y me abrazaba. Yo hice lo mismo con mi madre y acerqué su cabeza a mi pecho. Y los tres nos quedamos llorando en silencio, oyendo los aplausos de la tele y viendo como Sánchez Cerén y Cristiani se estrechaban las manos."